El Mercado de Don Quijote atrajo a numeroso público

El Mercado de Don Quijote atrajo a numeroso público

La plaza de Santa Cruz, habitual escenario de los mercados medievales en las fiestas patronales de Manzanares, acogió el pasado fin de semana el Mercado de Don Quijote que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha está llevando por toda la geografía regional centro de los actos conmemorativos del IV Centenario del Quijote. Tuvo una masiva respuesta de público y un buen número de actividades.

Cultura. Espectáculos
26-07-2005

El Mercado de Don Quijote celebrado los días 23 y 24 de julio fue el último de los actos incluidos en el programa de la feria y fiestas 2005 de Manzanares. La plaza de Santa Cruz volvió a convertirse en un zoco tradicional, ambientado en esta ocasión en la época cervantina para celebrar los cuatrocientos años de la publicación del Quijote. El público, aun habiendo acabado la feria, respondió una vez más de forma masiva a este tipo de mercados. "Está muy bien ambientado, hay muchos puestos y espectáculos", señaló la concejala de festejos, Beatriz Torres.

En el Mercado de Don Quijote encontramos unos cuarenta puestos repartidos por los dos espacios de la plaza de Santa Cruz y calles adyacentes. Hubo artesanos del cuero, forja o barro, videntes, vendedores de amuletos, plantas medicinales y embutidos de ciervo, dulces y hasta de pollos y patos auténticos o ratas de juguete que hicieron las delicias de los más pequeños. Como pequeños fueron los minilibros de otro puesto que agotó todos los volúmenes en miniatura del Quijote.

Tampoco faltaron los tenderetes donde reponer fuerzas con pizzas artesanales, patatas rellenas o tapas, aunque el más llamativo fue el de las aves rapaces, con impresionantes águilas sudamericanas, canadienses y ratoneras, un buitre africano, búho real, águila esteparia rusa, carabo común, halcón y lechuza. Óscar Gallego, experto en cetrería, realizó exhibiciones de vuelo con las águilas, que hicieron espectaculares vuelos desde los tejados hasta su puño por encima de las cabezas de los visitantes.

Durante las dos jornadas de mercado no faltaron las actuaciones. Hubo pasacalles con música tradicional, con actores que representaron pasajes del Quijote, como el de Sancho en la ínsula Barataria, cómicos malabaristas y molinos que se convirtieron en los gigantes contra los que luchó constantemente el protagonista del evento, el mismísimo Don Quijote de La Mancha.

La afluencia de público fue escasa en las horas centrales del día a causa del intenso calor de estos días, no así al atardecer cuando la plaza de Santa Cruz se llenó y creó un gran ambiente. Si alguien se lo perdió tendrá oportunidad de visitar este mercado en próximos fines de semana en localidades de la región gracias a la iniciativa de la empresa pública "Don Quijote de La Mancha 2005".