Optimismo por un futuro en igualdad

XXIII Jornadas de la Mujer

Optimismo por un futuro en igualdad

Otilia Romero, Mª Carmen Ruiz Escribano, Teresa Serna y Cristina Reina participaron en una mesa de experiencias para hablar de su empoderamiento

Temas como el sexismo, la maternidad, la corresponsabilidad y condicionantes laborales por ser mujer se abordaron este viernes en la mesa de experiencias celebrada con motivo de las XXIII Jornadas de la Mujer y en la que participaron cuatro manzanareñas que son un ejemplo de empoderamiento. Todas, con la ilusión de lo ocurrido este 8-M en España, vieron con optimismo el futuro, aunque se alertó del repunte del machismo en adolescentes alentado por modas musicales.

Igualdad y Mujer
10-03-2018
Autoridades y personal del Centro de la Mujer con las ponentes en la mesa

“No podemos bajar la guardia”, dijo a modo de conclusión la empresaria y emprendedora Otilia Romero de Condés, una de las ponentes participantes en la concurrida mesa de experiencias celebrada en la tarde del viernes. Tras coincidir en el esperanzador futuro que se atisba por el cambio que se ha visto en la sociedad este 8 de marzo, y por contar cada vez con más hombres en la lucha por la igualdad, expresó su preocupación por el resurgir del machismo en chavales muy jóvenes debido a algunas influencias de música, en alusión al reggaeton.

Este aviso llegó en la parte final de un acto que pasó como un suspiro por el interés de los temas que trataron la propia Otilia Romero, la atleta Carmen Ruiz Escribano, la joven diseñadora gráfica Cristina Reina y Teresa Serna, responsable de recursos humanos en Exide-Tudor. En la presentación de la mesa, la concejala de Igualdad, Beatriz Labián, dijo que las cuatro son un referente de mujeres empoderadas que han sabido sortear los obstáculos “y nos abren caminos a otras muchas mujeres”.

Labián valoró las actividades programadas esta semana “para visibilizar todas las  dificultades que a día de hoy tenemos las mujeres para conseguir la igualdad que nos reconocen las leyes”. La edil dijo que, como han demostrado las ponentes, “esas barreras no son infranqueables aunque todavía hay que romper muchos techos de cristal”. También animó a mantener viva la llama del 8-M todo el año para seguir conquistando el camino de la igualdad.

Ante el auditorio mayoritariamente femenino que llenó el local ‘La Bota de Oro’, las participantes en la mesa apelaron, precisamente, a la necesidad de dejar de ser endogámicas y de que más hombres se impliquen para avanzar en igualdad. “Necesitamos más hombres como el alcalde”, dijo Romero de Condés para resaltar la presencia de Julián Nieva.

La mesa estuvo moderada por la responsable del área de empleo del Centro de la Mujer de Manzanares, Valentina Isabel Vázquez. Las participantes narraron ejemplos y anécdotas de barreras sufridas en sus respectivos ámbitos, por ellas y por otras mujeres, como las que deben dejar todo hecho en casa para poder ir a correr una carrera, o cuando no se permitía a las mujeres entrar en las bodegas, o situaciones de acoso y de no poder vestir con libertad.

El debate sobre la maternidad salió a la palestra cuando la más joven, Cristina Reina, dijo que no podía ni plantearse ser madre por tener que renunciar a muchas cosas. “Debería ser un camino horizontal, no vertical, y no sé cómo hacerlo”, expuso ante sus compañeras. “No hay que renunciar a nada de lo que se quiera por ser mujer”, le aconsejó Teresa Serna. Por experiencia, Otilia Romero dijo que cuando una empresa tiene flexibilidad con sus trabajadoras “obtiene una gran responsabilidad de ellas”.

Participantes en la mesa

Teresa Serna Romero fue la primera persona que comenzó a trabajar en la fábrica Tudor de Manzanares con apenas 18 años, tras acabar sus estudios de COU. Cuarenta años después sigue en ella y es la única persona que se mantiene desde el primer día. Trabaja en el departamento de recursos humanos y el año pasado recibió la medalla de oro de la empresa. Con dos hijos y dos hijas, ha conciliado su vida familiar y laboral. También ha desarrollado su afición por la interpretación y dirección teatral.

Carmen Ruiz Escribano, de 51 años, es madre de dos hijas y de un hijo.  Actualmente preside el Club de Atletismo Manzanares, forma parte de la directiva del Circuito de Carreras Populares de Ciudad Real y gestiona la Escuela Municipal de Atletismo, en la que también es entrenadora. Tiene un gran historial como atleta, con cinto títulos en el Circuito de Carreras de Ciudad Real, así como el de campeona regional de 5.000 metros en pista (2011) y 4ª de España de maratón (2010) y de media maratón (2013) en su categoría.

Otilia Romero de Condés, con dos hijos y una hija, es un ejemplo de mujer emprendedora en un ámbito tan masculinizado como el del vino. Licenciada en Derecho , procuradora de Tribunales y enóloga, ha creado diferentes empresas. Dirige la feria World Bulk Wine Exhibition de Amsterdam y es la gerente del grupo Enopasión. El 2016 recibió el premio ‘Luisa de Medrano’ del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha por su lucha en favor de la igualdad.

Cristina Reina Sánchez-Carnerero, graduada en Diseño Gráfico, consiguió su sueño de dedicarse al arte. Hace cuatro años diseñó e ilustró el libro ‘Mi chica revolucionaria’, al que siguieron 45 portadas para libros, una marca, una voz propia y trabajos para Frida Ediciones, Planeta y Penguin Random House. Hace unos meses inició el proyecto editorial independiente Copelia Ediciones.

Taller literario

Al inicio del acto, participantes del taller de narrativa y poesía de la concejalía de Igualdad, dirigido por Mª José Maeso, aprovechó para recordar gran número de inventos realizados por mujeres, como los sistemas precursores del wifi y gps, la fregona, jeringuilla, libro electrónico, láser para oftalmología, antibióticos contra los hongos, nevera eléctrica, bote salvavidas y bengalas de emergencia marítima.

Saludo inicial de Beatriz LabiánIntervención de Teresa Serna