La renta per cápita de Manzanares se encuentra entre las más altas de la provincia

La renta per cápita de Manzanares se encuentra entre las más altas de la provincia

Manzanares se sitúa en el grupo de pueblos o ciudades de la provincia con rentas altas, a la par con Ciudad Real y Socuéllamos. El alcalde, Miguel Angel Pozas, que en el Pleno de los presupuestos hizo sobre todo labor pedagógica, interpretó en su contexto cifras inconexas sobre el ranking de renta per cápita elaborado por la Diputación que la oposición había usado para afirmar que la situación económica de la ciudad va en declive.

Actualidad Municipal
22-12-2005

La bajada de Manzanares desde el puesto siete que ocupaba en 1997 al treinta que ocupa en la actualidad, según un estudio sobre la renta per cápita provincial, dato que no negó, sirvió para que el alcalde diera a conocer el contexto en el que se deben interpretar esas cifras. Dejando de lado que la bajada en el ranking coincide con los años de gobierno Aznar -malos para Manzanares, ironizó-, dijo que en ese estudio la Diputación divide a los pueblos por categorías: muy altos (Tomelloso), altos, medios bajos y muy bajos, según que estén por encima o por debajo de la media provincial. Manzanares se sitúa en el segundo grupo y por encima de otros pueblos con más de diez mil habitantes como Alcázar, Daimiel, Puertollano, Miguelturra o Valdepeñas. Pozas invitó a la oposición a que cuando utilice un estudio lo use en toda su complejidad, sin pasar por alto aspectos significativos como el mapa en el que se visualiza la realidad descrita.

En cualquier caso el alcalde quiso dejar claro que la prosperidad de la economía de Manzanares, en una economía de mercado libre y, por tanto, no planificada, no depende del Ayuntamiento ni tiene relación directa con los presupuestos municipales, sino que es el fruto de la iniciativa privada y del dinamismo de pueblo.

Sobre los convenios urbanísticos firmados a lo largo del año -Polígono Industrial, Parque Tecnológico y Campo de Golf-, que enmarcan el contexto amplio del presupuesto y que los populares habían englobado en la categoría de "falsas esperanzas", señaló que si son falsas no tienen por qué tener buen fin y que si se realizan es porque son esperanzas fundadas. Tras recordar que la oposición se abstuvo en la prórroga solicitada por Luafer (complejo de Luis Aragonés) y votó en contra del campo de golf, dijo que sonaba a contradicción preguntar a renglón seguido qué hace el Ayuntamiento para repartir la riqueza que esos proyectos pueden generar. En cualquier caso señaló que el Ayuntamiento, llegado el momento, instará a los promotores para formar a las personas y firmar contratos en práctica de seis meses.

En relación con la Ciudad del Transporte, otro proyecto que los populares habían elevado a epítome de las falsas esperanzas, dijo explícitamente que lleva seis años de retraso por desacuerdos con el Ministerio de Fomento y concretamente con la Dirección General de Carreteras, pero que, por una parte, no se engañó a nadie y, por otra, se va a realizar más al norte y que será un proyecto mucho mayor del que se había pensado en un principio.

De los niveles de endeudamiento afirmó que si se habla en términos antiguos, el Ayuntamiento de Manzanares sólo tiene una carga financiera del 1,7 por ciento sobre un 25 por ciento posible, la menor de la provincia y de la región en pueblos del mismo nivel, y si se habla de capacidad de endeudamiento está en el 7 por ciento sobre un 110 por ciento posible. "Podríamos pedir un crédito de más de 2.000 millones", afirmó con rotundidad.

Sobre el remanente, fruto en buena parte del canon de gestión indirecta del agua, señaló que es un dinero que se administra con parsimonia y se gasta según las necesidades del municipio. Hasta ahora se han financiado con cargo a ese remanente los doscientos dieciocho millones que ha costado la biblioteca municipal y la amortización de unos créditos con La Caixa que eran caros.

El alcalde, que continuó aclarando conceptos que la oposición había usado de manera anfibológica cuando no torticera, precisó cómo es posible que se paguen menos intereses, por qué hay mayor recaudación sin elevar la carga impositiva, de dónde salen los ahorros y sobre todo, qué es un presupuesto, que no pasa de ser una previsión en números de las necesidades de una institución y que, por lo tanto, ha de ser flexible. Pozas explicó también que muchas obras, como el ascensor del Centro Social Divina Pastora, se habían hecho con financiación de otras administraciones y concluyó que el presupuesto se hace con buen criterio y no con los pies, como había afirmado la oposición.